Entrevista con Luis H. Álvarez
LO IMPORTANTE: LA PAZ.
Desde su amplia experiencia política y con más de
tres años de participar en la Comisión de Concordia y Pacificación (Cocopa), da a Voz y
Voto sus puntos de vista sobre lo que se está viviendo actualmente en el Estado de
Chiapas, y las posibles vías de solución que a todos comprometan. |
Esto los hace copartícipes de esta adicional responsabilidad, aunque
ciertamente la responsabilidad mayor la tiene la parte gubernamental, que por el hecho de
ser autoridad tiene mayor obligación de que se instrumenten las medidas por establecer el
diálogo.
* ¿ Qué impide en estos momentos restablecer el diálogo entre le
gobierno y el EZLN? ¿Cuál es la parte de verdad de cada una de las partes involucradas?
* No son preguntas fáciles de responder; por lo menos siento que no hay
una respuesta simple a ellas. La Cocopa, bien sabido es, elaboró un documento que trató
de sacar prácticamente de manera textual los Acuerdos de San Andrés. Ese documento fue
presentado simultáneamente a las partes, personalmente al subcomandante Marcos, porque
allá nos encontramos, y al mismo tiempo se enviaba vía fax a la Secretaría de
Gobernación. Al día siguiente el subcomandante nos dijo claramente: "el documento
para nosotros no resulta plenamente satisfactorio porque se dejaron fuera asuntos que
nosotros consideramos importantes".
Al día siguiente en Gobernación se nos dijo que en términos generales no había
problema, pero que necesitaban analizarlo más cuidadosamente y, particularmente, deseaban
que el Presidente -que en ese momento estaba fuera del país- lo viera. Consideramos
atendible la solicitud y posteriormente se nos indicó que el esfuerzo de la Cocopa era
loable, que había que ver si en términos estrictamente jurídicos sí era un documento
que pudiese ser respaldado por el Ejecutivo, si éste se presentaba ante el Congreso.
El ejecutivo ha manifestado que está dispuesto a respetar los acuerdos, pero que tienen
que hacer algunas adecuaciones que, desde el punto de vista del gobierno, no lastiman el
espíritu de los acuerdos; deben establecerse normas que cancelen la posibilidad de que
haya interpretaciones diversas en algunos de los acuerdos. Por ejemplo, en el tema de la
autonomía.
Si el EZLN no estaba plenamente satisfecho con el documento, francamente resulta difícil
entender por qué no acepta reanudar el diálogo para que en él esas cuestiones
significativas que no fueron incorporadas al documento pudiesen llegar a serlo. No sé yo
si eso sería posible, pero creo que bien vale la pena intentar. Por su parte, el gobierno
también parece que estuviera apostando a que el simple devenir del tiempo llevara a
situaciones de desgaste al EZLN. Creo que ambas actitudes deben modificarse, y estos
lamentables sucesos de fines de año deben llevar al convencimiento de que ellos están
incurriendo en una responsabilidad adicional.
* ¿Qué función desempeña y ha desempeñado en este largo proceso de negociación la
Cocopa?
* Bien sabemos que hay dos instancias: una de intermediación, la Conai, y otra de
coadyuvancia, que es precisamente la que integramos, los legisladores y que representa a
las distintas fuerzas políticas con presencia en el Congreso de la Unión. No ha sido
fácil la tarea, entre otras cosas por la pluralidad que en el interior de la misma se da;
desde un principio tuvimos dificultades, y no han sido superadas del todo.
* ¿Cómo cuáles?
* Bueno, es de esperarse que haya puntos de vista distintos en los que la ideología puede
o no estar presente, por eso llegamos al acuerdo de que los resolutivos se tomaran por
consenso. Hemos avanzado significativamente, lo hicimos con la composición anterior de la
Cocopa, y ahora las fuerzas políticas adicionales, presentes en esta nueva composición,
tienen que irse compenetrando en la forma de ser y de actuar de la propia Comisión y en
la situación chiapaneca que, insisto, es bastante compleja. Creo que no se debe descartar
del todo lo que la Cocopa ha conseguido. Por lo pronto, ahí donde se inicio el conflicto,
en las Cañadas, no ha habido un solo disparo o enfrentamiento; si vemos lo que ha pasado
en otros países, donde por muchos años y después de miles de seres humanos muertos se
llegó a acuerdos, por lo menos ese logro se ha conseguido aquí, importante, sí, más no
suficiente, porque siguen estando latentes los problemas que dieron origen al conflicto.
* ¿Algunos de estos puntos de vista distintos por cuestiones ideológicas han influido
para que la Cocopa no haya podido avanzar en los acuerdos de paz?
* No creo que necesariamente hayan sido las diferencias que se tienen al interior de la
Cocopa las que han influido para que el diálogo no se reanude. La Cocopa no es, mas que
digamos, un testigo; claro que un testigo muy peculiar, coadyuvante, que tiene que hacer
un esfuerzo para ir aligerando las tensiones que se dan entre las partes y establecer las
condiciones que propicien el diálogo. La ley que para el caso se elaboró es producto del
trabajo de la Cocopa, y ése es un hecho que no tiene antecedentes; establece el marco que
garantiza que pueden concurrir al diálogo quienes se han levantado en armas y que
mientras esto suceda no podrán ser tocados en su persona; están garantizados su
seguridad y el libre transito en la zona establecida para llevar a cabo el diálogo.
Hay que insistir en que deben respetarse los acuerdos para la reanudación del diálogo,
porque es bien sabido que si se declarara roto, se reabriría la posibilidad de las
reaprehensiones de los integrantes de EZLN; pero la única instancia que puede declarar
roto el diálogo es la propia Cocopa, y ésa es una garantía adicional que nosotros
tenemos.
* ¿ Esta situación puede darse?
Por supuesto que puede darse, pero nosotros esperamos sinceramente que no llegue a
ocurrir. Ahora, en relación con las diferentes actuaciones al interior de la Cocopa,
hemos entendido que, sin poder desconocerla, se identifica un interés superior que es el
de la nación, y ese dato nos ha alentado a hacer un esfuerzo particular para resolver el
conflicto.
* ¿ Se resiente la ausencia de Heberto Castillo en las negociaciones y dentro de la
Cocopa?
* Sí, por supuesto; el ingeniero Castillo, por su amplia experiencia y participación en
una serie de acontecimientos de diversa índole, tenia características muy particulares.
Yo me siento muy honrado de haber tenido la oportunidad de establecer una muy estrecha y
respetuosa relación con el ingeniero Castillo. De hecho, un poco en broma., Aunque no
tanto, nos llamaban el consejo de los ancianos.
* ¿ Que pasa ahora que ya no esta este consejo? ¿ Hay alguno que quiera llevar la batuta
dentro de la Cocopa?
* Mire, es cierto que los personalismos a veces se manifiestan, pero pudiendo yo dar una
opinión sobre esta materia no la voy a hacer pública, porque al aceptar formar parte de
la comisión debemos ser muy prudentes, muy cautos; Por supuesto, tengo opiniones muy
particulares respecto al desempeño de las partes, o al de algunos miembros de la
comisión, o de algún funcionario público, pero no las voy a hacer públicas porque
entonces estaría faltando al compromiso contraído. Se manejan situaciones muy delicadas
que deberían ser del estricto dominio interno de la comisión, porque externarlos
públicamente puede llevar al fracaso una determinada gestión. Esto a veces no sé
cabalmente entendido por algunos periodistas que insisten en que se les den respuestas
categóricas a un determinado planteamiento.
* ¿ Se ha desgastado la Cocopa?
* Yo no sé si se ha desgastado la Cocopa o no. Lo cierto es que la responsabilidad de
todos nosotros subsiste, y debemos actuar no en función de que se nos cuelguen medallas.
* ¿ Han estado cercanos a los dirigentes zapatistas?
* Lamentablemente no, hace un año que no tenemos un contacto directo, y la verdad, en
tanto lo tuvimos sentíamos que íbamos avanzando significativamente.
* Tratando de hacer una evaluación desde el levantamiento de 1994 a la fecha ¿en donde
ubicaría este último acontecimiento de violencia?
* Ciertamente es uno de los mas críticos, si no es que el más crítico porque siguen
presentes las razones por las que se originó el conflicto armado - la marginación, el
desempleo, la falta de oportunidades, la falta de respeto a los derechos humanos -, Todo
esto no sólo no se resuelve, si no que se agrava, y con estos otros agravios y enconos
que están surgiendo, el momento es crítico. Lo menos que podemos esperar es que, pagando
este elevado costo adicional, las partes reaccionen de manera positiva.
* ¿Es comparable este momento con el 68?
* Son características diferentes; en el 68 el movimiento era predominantemente
estudiantil; aquí se están manejando cuestiones que en este momento están haciendo
crisis en Chiapas pero que se repiten en diversas entidades del país, y por lo mismo, es
un riesgo probablemente mayor que el del 68.Creo sin embargo que las soluciones se pueden
encontrar; yo no veo, personalmente, por qué a través del diálogo no puedan encontrarse
tales soluciones. Soy un firme convencido de que la violencia jamás será el mecanismo
que pueda encontrar solución a los problemas. Personalmente creo que, entre otras cosas,
la acción de resistencia no violenta peros activa puede alcanzar resultados mejores;
tenemos el caso de Ghandi, que sin lastimar a nadie físicamente consiguió la
independencia de la India.
* ¿ Marchas como la del 12 de enero ayudan?
* Ciertamente. Mil veces preferible una marcha, un plantón, con todas las molestias que
ello pueda generar, que el enfrentamiento.
* ¿ Hace falta incluir algún nuevo actor dentro de las negociaciones?
* Yo mas bien creo necesaria la verdadera inteligencia, la buena fe, la firme decisión de
entender que más allá de protagonismos o de intereses particulares, por legítimos que
pudieran a ser, se identifica un interés superior.
* ¿Qué le dice a Luis H. Álvarez la presión internacional?
* Debería ser preocupante para el gobierno que desde el exterior se vea a México bajo
esta óptica. Ahora bien, yo creo que en el exterior hay posicionamientos de la más
variada índole; algunos tal vez adecuada, suficientemente informados, otros no tanto.
* ¿ Hasta dónde es responsable el gobierno en sus tres ordenes de lo ocurrido en Acteal?
* Ahora sabemos que el entonces gobernador no se entero de lo ocurrido parece haberlo
manifestado públicamente hasta el día siguiente, creo que a las seis o siete de la
mañana; ese dato, en sí mismo, es revelador. Quiere decir que alguien oculto la
información. Por las razones que se quiera, en el mismo gobierno local; entonces, debe
ahondarse la investigación que ya se inicio, para ver hasta donde hay funcionarios
involucrados y aplicar las sanciones, por rigurosas que sean, a todos y cada uno de ellos.
Por otro lado, ¿cuántos gobernadores ha tenido este estado en los últimos años? La
verdad que el único que llego a través de un proceso electoral renunció, y los demás
han sido designados desde el centro. Para resolver los problemas de una comunidad, toda la
comunidad tiene que involucrarse, es decir, gobernantes y gobernados. En Chiapas se
mantiene un esquema altamente centralista en la designación de este nuevo gobernador,
como en la de otros anteriores, en la que los chiapanecos poco o nada tuvieron que opinar.
Eso es totalmente inaceptable y forma parte del problema. El centro sigue mandando
supuestos gobernantes que naturalmente tienen que responder a los dictados centralistas, y
es muy difícil que puedan convertirse en gestores o representantes de los chiapanecos.
Este es otro dato que no se puede dejar de considerar; por bien intencionados que sean
algunos de los gobernadores, lo cierto es que la comunidad chiapaneca tal vez no lo siente
como propios.
* ¿Qué hubiera sido lo mejor?
* En estas circunstancias también habría que analizar si están dadas las condiciones
para que la comunidad pueda participar en los términos en que debe darse un proceso
electoral equitativo y verdaderamente democrático. Ese es otro aspecto que no podemos
desconocer, tal vez ahora se requieran medidas de excepción, pero con la rapidez que el
caso requiere, estas medidas podrían contribuir a sentar las bases para un proceso
electoral.
* ¿Qué significa para usted la designación de un nuevo secretario de gobernación?
* Es una manifestación adicional del desgaste que sufren los funcionarios cuando están
sometidos a normas rígidas, en un sistema que esperamos esté llegando a su fin, en el
que las decisiones se toman en forma cupular y donde hay enclaves de poder político que
han competido y que aparentemente siguen compitiendo por tener acceso al reparto del
botín. En tanto en el país no impere la democracia a cabalidad, se seguirán dando estas
cuestiones que tanto daño han causado a México, que han impedido su armónico desarrollo
y que lamentablemente han hecho imposible que el indiscutible potencial económico de este
país pueda ser aprovechado adecuadamente en beneficio de todos los mexicanos.
* ¿Puede empeorarse el clima de tensión con las elecciones electorales que se avecinan,
de no llegarse a un acuerdo?
* De no llegar a algún acuerdo y de no comenzar a fincar las bases para restañar las
heridas que se han abierto al interior de la comunidad chiapaneca, yo no sé cómo pudiera
pensarse que un proceso electoral se lleve a cabo en términos de equidad, garantizando a
los electores su participación sin presiones.
* ¿Serán también estas heridas las que impiden la reanudación del diálogo?
* Las heridas no por fuerza están directamente relacionadas con la actitud de las partes,
pero ahí están y cada vez son más profundas. Una vez que se llegara a firmar un pacto
de paz, habría que iniciar el largo camino de reconciliación. El pacto de paz tiene que
ser producto de acuerdos entre las partes, pero también debe ampliarse para que los
sectores chiapanecos acepten, por lo pronto, establecer una tregua con miras a dirimir las
diferencias que existen y que siguen profundizando.
Foto: Francisco Mata Rosas.